miércoles, 27 de octubre de 2010

MALEDICTO 16 Y LAS CRUCES DEL MIEDO

Cabeza del cuerpo sectario,
hipócrita vestido de fortuna.
Cómplice de salidas de armario
con emancipados de la cuna.

Le suda la polla la pobreza.
Con el hambre le suda el cipote.
Tú no comas nada pero reza,
que yo estoy limpiando lingotes.

Vividores de pirados del miedo,
que piensan que las llamas les acechan.
Odio y pena hacia los ateos,
y no ven que todos son carne de presa.

Católico, dame un besito en la mano,
la misma con la que le toqué el culo,
a los hijos de hermanas y hermanos,
que me admiran por todo el mundo.

Sintecho duerme en la escalera
que sube al banco de dinero robado.
Si no vas a darles una moneda
te vas largando para otro lado.

Para que vean que somos muy buenos,
pásate cada ciertos días,
que con lo que nos dan en cada pueblo,
te ofrecemos ropa y comida.

Orígenes de sangre y torturas,
amigos de las dictaduras.
Crucifijos y tumbas sagradas,
pantomimas para sacar tajada.

Qué decir de la indescriptible Biblia.
Líneas alucinógenas.
Ni ácidos ni morfina,
te descubren las notas de esta ópera.

Que parte de mi dinero
aparezca en sus cuentas,
hace que me cague en el clero
y mee la birra en sus puertas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario